El pasado domingo 26 de octubre, los capítulos de la ANEIAP de la Universidad Santiago de Cali, ICESI, Autónoma de Occidente y Universidad del Valle demostraron que cuando la voluntad estudiantil se articula, la transformación social ocurre. Así nació la jornada “Regalemos una Sonrisa”, una experiencia cargada de cercanía, alegría y humanidad que tomó vida en el Hogar Geriátrico San Joaquín, en el barrio Mariano Ramos. Lo que inició como una iniciativa conjunta se convirtió rápidamente en un ejercicio vibrante de solidaridad intergeneracional.
Con el propósito de ofrecer compañía, recreación y afecto a los adultos mayores, la actividad se desarrolló en un ambiente cálido y emotivo que invitó a compartir historias, juegos y sonrisas espontáneas. Los estudiantes no solo llevaron donaciones: llevaron tiempo, escucha y una energía renovadora que contagió a los residentes del hogar.
La entrega protocolaria de las ayudas, acompañada de palabras de agradecimiento, marcó el inicio de la jornada. Luego vinieron los juegos recreativos que rompieron el hielo, un bingo lleno de emoción que mantuvo a todos atentos a cada número y, como broche de oro, una celebración grupal de cumpleaños con pastel y aplausos que hicieron sentir especiales a los homenajeados del mes. Cada momento reforzó el vínculo entre generaciones y permitió que la jornada fluyera con naturalidad y entusiasmo.
“Regalemos una Sonrisa” trascendió como una experiencia que reafirma la esencia de ANEIAP: estudiantes que combinan liderazgo con sensibilidad social, formación profesional con vocación de servicio, y conocimiento con propósito.
La Universidad Santiago de Cali destaca esta iniciativa como un ejemplo inspirador del compromiso de sus estudiantes y de la fuerza transformadora que puede lograrse cuando diversas instituciones trabajan de la mano por el bienestar de la comunidad. Aquí, cada sonrisa compartida se convirtió en un recordatorio del impacto humano que la academia puede generar.
Datos
- Estudios muestran que los adultos mayores que se involucran en voluntariado tienen un mayor bienestar psicológico: por ejemplo, una investigación comparativa en Chile encontró que voluntarios sénior presentaban significativamente niveles más altos de satisfacción y autoestima que quienes no participan.
- El voluntariado en personas mayores también ha sido vinculado con mejoras cognitivas: según un estudio presentado en el congreso de la Alzheimer’s Association, quienes realizan trabajo voluntario muestran mejor memoria y función ejecutiva, lo que sugiere un efecto protector para el cerebro.
Elaboró,
Laura Rodríguez, Unidad de Comunicación.