Rosa, amarillo y puro orgullo santiaguino: la USC florece 

Cali está en modo primavera y la Universidad Santiago de Cali lo vive a todo color. Basta dar un paseo por el campus para entenderlo: los árboles de guayacán están robándose todas las miradas. La USC cuenta con 24 de estos gigantes de flores delicadas, de los cuales tres brillan con un amarillo radiante y el resto se visten de rosa en todas sus versiones: desde un tono pastel romántico hasta un fucsia vibrante que parece pintado a mano. Algunos aún son jóvenes y guardan su primera gran floración para más adelante, pero incluso así ya son parte del encanto de nuestros senderos. 

Y lo mejor… ¡estamos en plena temporada! El guayacán, uno de los árboles más icónicos de Cali, tiene este fenómeno mágico dos veces al año, especialmente entre julio y octubre, cuando después de los días secos decide estallar en color. En cuestión de días, su copa se cubre de flores que, con cada brisa, caen como una lluvia de pétalos, creando alfombras naturales que parecen sacadas de una película romántica. Es de esas escenas que te hacen detenerte, sacar el celular y llenar tu galería de fotos (sí, sin filtro se ven increíbles). 

Pero estos árboles no solo son bonitos, también son súper importantes para la vida en la ciudad. En la USC, los guayacanes son refugio para aves, mariposas y otros polinizadores, y cumplen con la misión de darle más oxígeno, frescura y sombra a nuestros días universitarios. Su ubicación en el campus no es casualidad: se han sembrado pensando en el bienestar de todos y con un compromiso serio hacia la sostenibilidad. Por eso, se cuidan con riego especial cuando son jóvenes, podas responsables y protección para que crezcan fuertes y duren generaciones. 

Caminar por la universidad en esta época es como entrar a un escenario vivo: pétalos que caen sobre tus zapatos, sombras frescas para conversar con amigos, y ese aroma sutil que te recuerda que la naturaleza también sabe celebrar. Si tienes un break entre clases, date el tiempo de recorrer los senderos, encontrar tu guayacán favorito y sentarte un rato bajo su copa. Míralo de cerca, toca su tronco, siente la textura de las flores caídas… y sí, tómate la foto (o varias, porque no todos los días tienes un set natural así). 

Así que ya lo sabes: este es el momento para levantar la vista y dejarte envolver por la temporada de guayacanes en la Universidad Santiago de Cali. Vive el color, respira la naturaleza y comparte la experiencia. Que cada paso por el campus sea una excusa para detenerte, disfrutar y recordar que, en nuestra universidad, además de aprender, también florecemos. 

Elaboró, 
Laura Rodríguez, Unidad de Comunicación. 

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